¡Hola!
En el hipotético caso de que alguien, en algún momento, lea las entradas de este blog y se pregunte qué es y de donde viene esto sirvan estas líneas como muy breve introducción.
El propósito de este blog no es otro que el de expresar las ideas, experiencias y sentimientos que personalmente voy teniendo, y ningún otro. Ya veremos cómo evoluciona y en qué acaba. Pido perdón de antemano por los comentarios que puedan resultar de peor calidad que otros y por las (esperemos que poco numerosas) veces en que pueda herir la sensibilidad del lector, pero escribir es también en parte algo terapéutico para mí y aunque andaré con pies de plomo no me la cogeré con papel de fumar.
¿Porqué minicamisetas y tornillos? Es un título inspirado en un cómic (premio para el que averigüe cual) sobre el absurdo, la diversidad, el cambio, los pequeños detalles, que pretende ilustrar que no será un blog sobre un tema en concreto, sino que variará en temática, intensidad y tono acoplándose a mis propios estados de ánimo y vivencias. Trataré de ser más homogéneo que el Tractatus de Wittgenstein, pero no sorprenderse si tras una sesuda entrada de temática política con lenguaje pedante incluyo la entrada más burda sobre lo más anodino que se me haya ocurrido en el momento.
Espero disfrutar y que disfrutéis con este blog. La única regla será la educación en las aportaciones, y la exigiré en la medida en que yo mismo la cumpla. Si debe haber una regla secundaria que sea la coherencia de los comentarios con las entradas (trolls, spammers y flooders NO: gracias). Una última nota: me encanta la crítica constructiva. Cualquiera que discrepe con el punto que sea y quiera aportar una visión diferente será bienvenido mientras se ciña a la única regla.
Que seáis felices
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Si no hubiera leído la entrada, solo con el nombre que has elegido para firmar me valdría para identificarte :) ¡Me alegro de verte por aquí! Especialmente un día como hoy, que va a estar tan plagado de sorpresas (no todas agradables, ya te lo aseguro). No doy con el cómic... por lo de "minicamisetas" ha de ser, cuando menos, sugerente; por lo de "tornillos", quizá con robots o centrado en algún tipo de maquinaria. Pero como es sobre el absurdo, la diversidad, el cambio y los pequeños detalles... no sabría decirte.
ResponderEliminar¡Ah! Y Pompoko... yo me quedé flipado en tanto que esperaba una película totalmente infantil; encontrarme con semejante revolución REAL, por muy mapache que sea, me chocó sobremanera y me mantuvo alerta ante lo que pudiera pasar.
En fin, un saludo :) ¡Nos vemos pronto!
Para sorpresa la que me he llevado yo al darme cuenta de que un blog(casi)sin mensajes tenia un seguidor. Lo de adivinar el cómic es para matrícula, lo reconozco, así que no pasa nada porque o te suene. Como pista si no has leído el cómic por esas palabras no vas a encontrar el título ni el autor, así que nadie se extrañe de no caer en el título: ya digo que es para matrícula...
ResponderEliminarCoincido en que Pompoko es una película muy especial. En parte por ser muy japonesa: si no conces la figura mitológica del tanuki te será imposible entender muchas cosas de la película. Pero al igual que con varias pelis de Ingmar Bergman me gustó la segunda vez que la ví, jejeje.
Un abrazo y hasta pronto